Pocas combinaciones me resultan tan interesantes como las verduras con las que se prepara la escalivada.
Con un buen aliño se conforma un plato delicioso
Consejos para llegar a la excelencia
- Esta receta busca el contraste. Crema templada, tomate frío y pan crujiente. No sirvas la crema muy caliente
- Cuidado no te pases con el vinagre
- Siempre que usamos pan tostado no incluyas trozos quemados. Dan un sabor horrible.
- No emplates el plato hasta justo el momento de servir. Se reblandecerá el pan.
Ingredientes (8 tapas)
- Escalivada preparada 300 gr (Hacendado, Bonarea)
- Un huevo
- Vinagre de vino o de Xerez
- Nata liquida (un chorrito)
- Tomate maduro
- Pan
- Sal y pimienta
Preparación
(10 minutos – dificultad baja)
Pon toda la escalivada en un vaso de batidora. Salpimiéntala e incorpora un poco de vinagre.
Tritúrala hasta obtener un puré rojo anaranjado.
Pruébalo y rectifica a tu gusto de sal, aceite y vinagre.
Incorpora la escalivada batida a una olla o cazo de cocina y ponla a fuego medio.
Mientras se calienta, separa la clara de la yema.
Levanta la clara.
Incorpora la clara y la nata liquida a la olla.
Mézclalo todo bien, con movimientos envolventes de abajo a arriba para no perder el aire de la clara levantada.
Sube el fuego y lleva a ebullición. deja que borbotee un par de minutos sin dejar de remover la mezcla.
Pasa la crema a un bol y deja que se enfríe.
Emplatado
Te propongo servir esta receta de forma individual, en un vaso de chupito, combinándola con tomate a dados y pan tostado.
Pon unas rebanadas de pan a tostar.
Mientras tanto, trocea en dados pequeños un tomate maduro.
Rellena el fondo de cada vaso o copa pequeña con los dados de tomate.
Trocea el pan tostado, también en dados pequeños.
Justo antes de servir, rellena los vasos con la crema, dejando un dedo de espacio para el pan tostado.
Corona cada vaso con los tostones.
¡¡A triunfar!!!