Prueba este primer plato tan mediterráneo.
Una mezcla de sabores poco habitual pero deliciosa.
Consejos para llegar a la excelencia
- Usa el mejor jamón serrano que te puedas permitir, pero no hace falta que sea excelente.
- Tuesta previamente los piñones en una sartén, dan un toque ahumado.
- Haz pruebas con el aliño hasta que sea de tu gusto, y apunta las cantidades para otra ocasión.
Ingredientes (2 personas)
- Un calabacín mediano
- Jamón serrano (100 grs. por persona)
- Piñones
- Miel
- Limón exprimido
- Aceite de oliva virgen extra
- Tomillo
- Sal y pimienta negra molida
Preparación
Lo primero de esta receta es tostar un poco los piñones. Pon una sartén sin aceite a fuego medio-alto.
Mientras se calienta extiende el jamón serrano, cortado con la mano en trozos medianos, sobre el plato o fuente en la que vayas a servir esta receta.
Cuando la sartén esté caliente echa un puñado de piñones por cabeza y muévelos constantemente hasta que se doren. Reservalos.
Trocea el calabacín en dados pequeños. Cubre de aceite del fondo de la misma sartén para cocinar el calabacín a fuego medio-alto. Muévelos frecuentemente con una cuchara de madera. Añade sal y pimienta negra molida.
Mientras se cocina el calabacín puedes aprovechar para preparar el aliño.
En un bol para microondas incorpora dos cucharadas soperas de miel, una cucharada sopera de aceite y el zumo de medio limón. Mézclalo bien con un tenedor o unas varillas.
¡Revisa el calabacín, no se vaya a hacer demasiado!
Emplatar
Esta receta te permite tener el jamón serrano extendido, el calabacín cocinado y el aliño preparado para terminar de calentarlo todo y emplatarlo antes de sacarlo a la mesa.
Termina de saltear el calabacín. Al menos que esté templado al emplatar.
Mete el aliño en el microondas unos 20 ó 30 segundos, para que se funda la miel y emulsione bien. Prueba la mezcla e incorpora mas limón o mas aceite hasta que esté de tu gusto y mézclalo bien. Tienes que conseguir un sabor compensado entre el aceite y el limón.
Para terminar espolvorea sobre el aliño un poco de tomillo.
Extiende el calabacín sobre los trozos de jamón, vierte el aliño por todo el plato y espolvorea los piñones.
Acompáñalo de un buen pan por que seguro que querrán untar.
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